«Ahora esto de las tunas me parece una chorrada, pero de chiquitillo era un puntazo.Ibas con los mayores, salias por la noche y te ponian copas de anis en las casas»
Roberto Iniesta ya colgaba con una guitarra a la temprana edad de 12 años, lejos de imaginar que un dia seria uno de los artistas mas grandes del rock que nos a dado este país.
El pequeño Iniesta curso sus estudios en el colegio de La salle en su Plasencia natal. A los 12 años tiene su primer contacto con la música y no precisamente en un grupo de rock, Robe era la mascota de la tuna universitaria y sus primeros pinitos cantando se pueden imaginar que pasaron desde los clavelitos hasta el cielito lindo, canciones típicas de la tuna. «Ahora esto de las tunas me parece una chorrada, pero de chiquitillo era un puntazo.Ibas con los mayores, salias por la noche y te ponían copas de anis en las casas» confeso hace unos años el cantante.
Tuvieron que pasar unos cuantos años, hacia sus 20 primaveras cuando se dio cuenta de cual era su sitio en la vida, ser músico y de rock ,sin darse apenas cuenta fue escalando poquito a poco esa cima que lo llevaría junto a su banda Extremoduro, muchas veces teniendo que retroceder en esa larga lucha pero resurgiendo de nuevo y vuelta a escalar hasta llegar a lo que es hoy «Una estrella del rock» en lo mas alto.
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